(Artículo publicado en Revista ‘Devoto Historia’ N° 28 – Otoño 2013)
Por Alberto Rodolfo Gawronsky
Nicolás Levaggi, fue un vecino de Villa Devoto, que participo en la creación de medio centenar de escuelas en el país. Una replica de Sarmiento en este siglo.
Este argentino ilustre, nació el 17 de junio de 1920, en el barrio porteño de Villa Crespo. A los cinco años de edad, sus progenitores lo trajeron a vivir a nuestra Villa.
Su residencia de la calle Pedro Lozano 4503, esquina avenida Segurola, fue el centro de su actividad docente, permaneciendo en el barrio, hasta aproximadamente los cuarenta años de edad.
Toda su actividad primaria la realizo en la escuela numero 15 Antonio Devoto y luego de recibirse de maestro normal nacional fue docente de quinto grado por mas de quince años consecutivos.
Su padre, Juan, genoves de nacimiento y su madre holandesa, Guillermina Ferwerda, con generosidad y sacrificio lucharon para que sus hijos pudieran estudiar y elevarse hacia un futuro promisorio, así consiguieron que seis de sus siete hijos fueran maestros.
Levaggi, estaba casado con Susana Beatriz Crivelli y de este matrimonio tuvieron dos hijos, Maria Susana y Fernando Nicolás.
Nicolás Levaggi se recibió de maestro nacional normal en la escuela normal de San Martin en el año 1940. mientras curso sus dos últimos años de la carrera, instalo en su casa una academia para ayudar a los chicos con estudios primarios, así adquirió sus primeros ingresos para poder ayudar económicamente a su familia.
Sus comienzos como docente, fue al ser nombrado maestro suplente en una modesta escuela de Hurlingham, por la noche se desempeñaba en el Servicio Penitenciario, teniendo la base de operaciones en la ex Unidad U2, mas conocida como Carcel de Villa Devoto. Durante doce años tuvo a su cargo la seccion de analfabetos de la Penitencia Nacional, pero su trabajo en dicha institucion no fue en vano, ya que fundo la escuela Especial de Adultos, precisamente en la Ex Unidad 2 ya mencionada.
Tambien en el ex Campamento Laboral Agrícola en la Unidad numero 19 de Ezeiza.
En el contacto con los penados aprendió a valorar al hombre en su esencia mas intima y convencido de que la ignorancia es una de las sendas peligrosas que conducen al delito, por ello se aboco a la tarea de lograr que en los penales se abrieran un ciclo secundario.
Durante el año 1960 con el aval del Profesor Jorge Thevedin funda la escuela numero 62 en el partido de Hurlingham, con lo que comenzara una importante serie de fundaciones de establecimientos educativos, que comprendían desde el Jardin de Infantes, escuelas secundarias, logrando el promedio de una por año en los cuarenta y siete años de lucha educacional.
Creo escuelas en todo el país, en localidades como Morón, Hurlingham, Haedo, Mar del Plata, Córdoba, Bragado, Esteban Echeverría, Necochea, Santa Cruz , etc., lograba construir una escuela, buscando una zona en la que hacia falta un establecimiento educativo, conversaba primero con el dueño del terreno, luego con el gobierno de turno hasta lograr que lo compren, a partir de allí, hablaba con los vecinos y los convencía de que colaboren con el, para crear el nuevo colegio, después compraba todos los materiales hipotecando su propia casa varis veces y así con colectas y donaciones comenzaba su construccion. Mientras tanto hacia los tramites normales y registraba todo lo que hacia falta, luego después de conseguir dinero prestado y con el propio sueldo devolvía los prestamos evitando con ello las demoras, pues pensaba que era la única forma de apurar todo el tramite. Tuvo la suerte de encontrar buena voluntad en el área oficial y privada para concretar sus objetivos.
Su mayor virtud fue pelear con el fin de lograr los materiales necesarios, así se apersonaba a una fabrica y ofrecía padrinazgo de una escuela y a cambio pedía que le regalaran vidrios, puertas, ventanas, cerámicos, entre otros materiales, consiguiendo los elementos necesarios de esa manera.
A traves de su longeva vida fue galardonado en reiteradas oportunidades ortigándosele el 25 de setiembre de 1996 la “Rosa de Oro”, por la fundacion Carlos Alberto Tapia, el 28 de setiembre de 1996 recibió el premio al Dia del Maestro y Profesor, otorgado por diversos directores del Partido de Hurlingham. En 1998 recibió otra distinción por la accion educativa y cultural y durante ese mismo año La Comision de Asuntos Culturales y la Comision de Educación de la Cámara de Diputados de la Nación, oficiaron un homenaje al maestro Nicolás Levaggi por su destacadísima labor docente y su inestimable aporte comunitario de escuelas.
En el año 2005 las autoridades del Rotary Club de Villa Tessei, les entregaron a sus hijos Maria Susana y Fernando Nicolás el premio del Centenario, reconociendo la trayectoria del maestro Nicolás Levaggi por la fundacion de cincuenta escuelas en todo el ámbito de la Republica Argentina.
Durante el año 2007 se le dio el nombre de Nicolás Levaggi al Jardin de Infantes número 904 en el distrito de Hurlingham. En el año 2012 el Senado de la Provincia de Buenos Aires, lo declara “Ciudadano Ilustre”.
Uno de sus últimos sueños fue la culminación del complejo educativo para discapacitados, disminuidos visuales, sordos e hipoacusicos Marta Ramos Mejia de la localidad de Haedo.
Nicolás Levaggi fue calificado por sus amigos como temperamental, si en algo se diferencia este maestro de Domingo Faustino Sarmiento, tomando como referencia el área educativa es por la sencilla diferencia de haber nacido en el siglo XX, con su enorme obstinación y una tiza confirmo durante treinta y cinco años de docencia activa que uno solo es el cimiento de la sociedades saludables: la educación.
Este inmenso maestro, habia logrado que treinta escuelas de la zona de Hurlingham, William C. Morris y Villa Tessei retiraran semanalmente todas la leche que deben consumir sus alumnos por acuerdos celebrados con la familia Kasdorf, que luego continuara la empresa Sancor.
Por un memento al tiempo que corre en direccion al pasado cuando el vigoroso maestro es llevado a la escuela Antonio Devoto, en un maravilloso reencuentro, revisto como colega de sus propios inolvidables maestros, Nicolás Maschia, Juan Delucchi, Matilde Casanova, allí dentro de esas históricas aulas, Nicolás Levaggi enseño de manera inolvidable la regla de tres simple, la moral incorruptible, la ortografía perfecta y el valor sacramental de la palabra empeñada.
Allí el maestro lloro lagrimas de emoción, por algo inexplicable y bello, percibir que sobreviven el aroma a la goma de borrar y el perfume a madera de lápiz intactos. Recordar cuarenta años después, cuando el dia era agradable daba clases en el parque del viejo colegio, y transformaba la vieja Educación Física en adorables clases de fútbol.
Seguramente su obra y su carrera no hubieran sido posible sin la ayuda de su madre, su esposa, de Santiago Morillo su Director de la Escuela Normal de San Martin, de Jose Alarcón, el hombre inmaculado de Villa Devoto que lo puso en camino, de Jorge Daniel Thevedin, el gran educador bonaerense, apuntalado fervorosamente por el senador Manuel Graña, con su ayuda incalculable para fundar escuelas.
Antes de fallecer en una charla con el periodista del diario La Nación, expresaba “me gustaría que me recuerden no solo por la obra que tuve la posibilidad de llevar adelante, sino por la vocación de servicio y el respeto por la enseñanza que siempre quise imprimirle a todos mis actos, lo cual redunda en una defensa sólida de la familia, principal sostén de la sociedad”.
Nicolás Levaggi, fallece el 14 de marzo de 2005 en la ciudad de La Plata a los 85 años de edad.
N/A: Vaya el agradecimiento al maestro Juan Carlos Levaggi (1), primo de Nicolás, por los datos aportados para este trabajo.
(1) Ex Director del Colegio Antonio Devoto, continuador de su primo en las tareas en la Carcel de Villa Devoto.
Bibliografía
La Prensa, 25/09/1996
Clarín, 11/09/1988
La Nación, 02/08/1995- 25/09/1996
La Capital (MdPlata), 24/03/1985
El Dia (La Plata), 26/06/1999.