Maestro Gabriel Francisco Bergogna Primer director de orquesta no vidente en la historia de la música

 Por Susana Costa

«El verdadero artista siempre debe decir algo a través de su obra
y tiene que luchar constantemente contra la mediocridad,
la incomprensión mayoritaria y la discriminación.
Su obra nunca será válida, si solamente contiene un muestrario de recursos técnicos,
sin tomar en cuenta a la expresión. (Gabriel F. Bergogna) 

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Nacer ciego y no rendirse ante la adversidad. Esta es la marca indeleble que distingue al maestro Bergogna de entre sus colegas músicos.

Nacido en Buenos Aires el 14 de septiembre de 1960 en los límites de Villa Devoto, barrio al que su familia se transferirá cuando contaba con seis años y donde continua residiendo. Descubrirá en su infancia el amor a la música de la mano de su primer maestra de piano, también no vidente, a la que el maestro recuerda con profundo cariño y respeto ya que será a través de ella y de la música que el pequeño Gabriel descubrirá un universo de luces, colores y sentidos que se convertirán en el refugio que cobijará su vida entre fusas y melodías.

Aquellos primeros acordes lo llevarán a continuar sus estudios en el Conservatorio Nacional de Música Carlos López Buchardo donde a la edad de 17 años obtendrá el título de Profesor Nacional de Música, especialidad piano. Luchador incansable y vencedor de fantasmas un año antes había ofrecido su primer concierto en La Biblioteca Argentina para ciegos.

Su vida escolar deberá superar enormes dificultades. Varias serán las escuelas que negaron su matriculación insistiendo que, por su condición, debía cursar sus estudios en escuelas diferenciales. El incondicional apoyo y la tenacidad de su madre, Señora Olga Vasallo lo llevarán a finalizar sus estudios primarios en la escuela Nro. 6 Guido Spano para continuar la secundaria en la escuela Nro. 3 Tomas Espora del barrio de Liniers.

Convertida la música en su principal inspiradora compondrá a los 17 años su primera Obertura para piano al tiempo que consolidaba su carrera como concertista de piano. Su vasta trayectoria lo encontrará ofreciendo conciertos en el Colegio de Abogados de La Plata; Teatro Municipal de Paraná; Auditorio de Mar del Plata; Sociedad Hebraica Argentina; Centro Naval de Bs.As.; Salón Dorado de la Alianza Francesa – Argentina; Club Francés; la Universidad Nacional de Villa María Córdoba; Centro Cultural General San Martín; Centro Cultural Ciudad de Buenos Aires; Salón de Actos de la Facultad de Derecho de Buenos Aires; Auditórium de Belgrano; Salón Dorado del Teatro Colón.

En el exterior, actuará en la Liga Braille de Bruselas, el Palacio de Gaviria de Madrid, el Centro de Arte Contemporáneo Reina Sofía de Madrid. La lista continuará con recitales radiales y presentaciones televisivas como las efectuadas en: A.T.C., Canal 13 de Buenos Aires, Radio Nacional, Radio Municipal, Ciclo «Los Intérpretes» de Radio Rivadavia, Radio Exterior de España, Cadena Cope de Madrid, Radio Intercontinental de Madrid y muchos otros medios de la Argentina y del exterior.

Su labor como solista se verá consolidada con sus actuaciones en la orquesta de cámara Mayo, la orquesta Filarmónica de Buenos Aires, la Sinfónica Nacional y Sinfónica del Teatro Argentino de La Plata.

A aquella primera composición a la edad de 17 años le sucederán diversas partituras de su autoría: Sonata para piano, Óp. 3; Sonata para piano, Óp. 8; Cuartetos para cuerda, Óp. 5; Sinfonía N1 Óp. 16; “Job”, narración musical en dos actos; dos Conciertos para piano y orquesta; varias obras de música de cámara, canciones, obras sinfónicas breves y tres cantatas.

Sus inquietudes musicales no finalizaron en los conciertos y en la composición musical, proponiéndose ser director de orquesta. Pero como? Los directores de orquesta observan a los músicos y no solo la batuta los dirige, hay gestos, miradas que el profesor Bergogna debería suplir con ingenio y trabajo. Debía coordinar los distintos instrumentos que la componen, corregir a los maestros ejecutantes de la orquesta, la dinámica, la debida interpretación rítmica incluso la dirección de los arcos de los instrumentos de cuerdas. Como director debería poner el máximo empeño en la afinación de la orquesta condición sine qua non para garantizar una gran actuación.

Pero su tesón y capacidad lo llevarían a que el Nuevo Diccionario Grove de Música y Músicos( i )  que se edita en Gran Bretaña grabara su nombre para la eternidad: el argentino Gabriel Bergogna se convertiría, luego de graduarse como director de orquesta en el año 1997 en el primer no vidente en dirigir en el mundo. Ofrecerá su primer concierto integral con la Orquesta Sinfónica Juvenil General San Martín, el día 3 de octubre de 1998.

En el largo camino que lo llevaría a obtener el título de director de orquesta será puntal fundamental su esposa, la artista plástica y poeta Claudia Mercatante quien relata : “Muchas veces, cuando estábamos de novios me manifestaba su inquietud por ser director de orquesta, cosa que no había podido concretar por la carencia de antecedentes de directores de orquesta ciegos a través de la historia de la música mundial. Quería conseguir esa meta porque sentía una gran vocación por la dirección orquestal y porque esa vocación estaba postergada en su nutrida trayectoria artística. Así es que conversando con el profesor titular de dirección orquestal del Conservatorio Nacional Superior de Música, Maestro Mario Benzecry ( ii ), convinimos en que yo acompañara a Gabriel en las clases de dirección orquestal que comenzaron para nosotros en abril de 1996. A medida que pasaba el tiempo el desafío se hizo patente, ya que había estimulado a Gabriel a encarar los estudios de dirección orquestal y estaba plenamente convencida de sus dotes

artísticas. Entonces surgió la pregunta, ¿Cómo lograr el objetivo de que Gabriel se convierta en el primer director de orquesta ciego del mundo? ¿Cómo transformar los gráficos visuales de Mario Benzecry en algo palpable para mi esposo?”

Siendo la dirección de orquesta la más visual de las actividades musicales el desafío de transmitir con gestos precisos la intención deseada sumado a la inexistencia de partituras orquestales en Braile ( iii ). La ayuda de su esposa en la transcripción de partituras y la creación de figuras táctiles en plastilina para que el maestro pudiera identificar ángulos, curvaturas , golpes de batuta que se refieren a las diferentes intenciones musicales que el director debe transmitir a los músicos.

Claudia Mercatante fue la encargada de diseñar maquetas para las diferentes posiciones de una orquesta sinfónica: antigua, moderna y de foso. Debería conocer perfectamente estas posiciones no solo para rendir los exámenes correspondientes sino para capacitarse en la dirección de cualquier tipo de orquesta. Superados los primeros temores y dificultades el 6 de octubre de 1997 el maestro Bergnona obtenía su título de director de orquesta. Hecho de relevancia internacional seria cubierto por la prensa local e internacional.

Luego de aquel debut de 1998 donde los espectadores sintieron, según las criticas de la época, una profunda emoción al ver entrar al maestro

Decía la Agencia EFE el 9/4/99

“El compositor explicó a EFE cómo a través de maquetas diseñadas especialmente para él puede conocer las posiciones de los distintos instrumentos de la orquesta. Bergogna también se apoya en diseños de plastilina para aprender los movimientos que debe ejecutar a la hora de dirigir. “Mi mujer, Claudia, modela en plastilina esos movimientos y yo, a través del tacto, los memorizo”, dijo el director.”

La Nación en su edición luego del primer concierto dirigido por el maestro expresaba: “El director argentino Gabriel Bergogna se presentó a sala llena, en el Aula Magna de la Facultad de Derecho al frente de la Sinfónica juvenil Libertador San Martin, en una velada de gran intensidad emocional y notable nivel artístico. Bergogna, que pese a su ceguera se ha distinguido como discípulo de Mario Benzecry en conducción orquestal y de Roberto Caamaño en piano, utiliza como batuta una común aguja de tejer, pese a lo cual dirigió en forma admirable todo el espectáculo, que comenzó con su Obertura opus 6, donde plasma un maravilloso mundo de sonidos, con pulcra interpretación orquestal de los jóvenes instrumentos…”

El título y las críticas elogiosas no le abrirán las puestas deseadas. Tal vez por temor, algunos músicos rechazaron la posibilidad de ser dirigidos por un no vidente. Vio empañada su carrera sufriendo en carne propia hechos de discriminación. El periódico español El Mundo decía en su edición marzo de 2003: “Este argentino ‘no tiene pelos en la lengua’ cuando denuncia «la discriminación

que sufro por parte de los Gobiernos argentino y de la ciudad de Buenos Aires, que no me permiten dirigir las orquestas oficiales».

Los eventos discriminatorios mencionados lo llevaran a presentar un amparo ante la justicia resuelto en la Sesiones ordinarias de noviembre de 2003

Las comisiones de Cultura y de Discapacidad han considerado el proyecto de declaración de la señora diputada Parentella y otros señores diputados,

por el que se expresa beneplácito por el acuerdo al que arribaron el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y el Poder Ejecutivo nacional en

el juicio de amparo promovido por Gabriel Bergogna, director de orquesta no vidente, que le permitirá dirigir un concierto en el Teatro Colón en abril del 2002 y la Orquesta Sinfónica Nacional en el último trimestre del 2002.

El artista aseguró estar dolido por considerar que el trato recibido, por el que tuviera que acudir a órganos superiores para su resolución, por parte de las autoridades de su país no tenga que ver con sus aptitudes como director, puesto que su trayectoria habla por sí misma y que no tienen ningún fundamento profesional, estas acciones no se justifican.

La carrera musical de Bergogna fue acompañada con un gran éxito de público y crítica. Sus interpretaciones y obras son muy bien recibidas. Compositor inspirado que expresa emociones y contrastes; pianista poseedor de una técnica brillante, expresivo y para grandes empresas, son sólo unas pocas de las tantas expresiones elogiosas que tuvo para con él la crítica especializada. Su concierto de graduación como director de orquesta fue calificado de meritorio y brillante por la prensa europea y canadiense. Esto le valió que se hicieran reportes y documentales sobre su persona, transmitidos mediante medios gráficos, radiales y televisivos de: Alemania, Italia, Francia, Rusia, España, Canadá, USA y Colombia.

La Televisión Alemana y la Cadena UNIVISION realizaron dos documentales especiales sobre el Maestro Bergogna y su esposa, esta última en su carácter de creadora de la metodología que le permitió al Maestro, constituirse como el primer director de orquesta invidente del mundo.( iv )

Aún resuenan en mis oídos los acordes surgidos del suave deslizar de las manos del maestro sobre el piano en el estudio durante la entrevista que le realizáramos y nuestra imaginación intuyó los aplausos interminables que habrá recibido en su debut como director orquestal aquel 3 de octubre de 1998 cuando se convirtió en el primer director no vidente en la historia de la música.

NOTA

Los datos volcados en este artículo fueron obtenidos en la entrevista realizada al maestro Gabriel Bergogna y a su esposa la artista plástica y poeta Claudia Mercatante en su vivienda de la calle Gabriela Mistral del barrio de Villa Devoto

( i ) The Grove Dictionary of Music and Musicians (Diccionario Grove de la Música y los Músicos) es un diccionario enciclopédico de música y músicos, considerado por muchos estudiosos como la mejor fuente referencial en su tema en inglés

( ii ) Argentino. Director de orquestra y profesor de directores

( iii ) Sistema de lectura y escritura táctil pensado para personas ciegas. Se conoce también como cecografía. Ideado por el francés Louis Braille a mediados del siglo XIX.

( iv ) Extracto de la página WEB del artista