Mujeres que dejaron su obra en la Villa
Filomena Devoto de Devoto
                                                                                                                                            Por Alicia Rapagnani

Son muchas las mujeres, que mediante su generoso accionar, vocación por el trabajo y lucha tesonera, han dejado huella a su paso por la Villa, trascendiéndola en algunas oportunidades.
Cada una, con una impronta diferente, según sus conocimientos y capacidades, lograron el crecimiento común en diversos terrenos.
Entre ellas mencionaremos a Elina Pombo de Devoto, Carolina Pombo, Mercedes Castellanos de Anchorena, Isabel Abeleyra, Ann Dey, Jane Ap’Iwan, miss Ogan, Blanca Rojas de Álvarez, María Maetzu, Lía Correa de Yrurtia, Elena Larroqui de Roffo, Filomena Devoto de Devoto, Sor María de la Paz, María Luisa Devoto de Bustillo y muchas más que irán surgiendo del entrañable recuerdo que dejaran.
Es esta la ocasión, de conocer el accionar de doña Filomena Devoto de Devoto.
Era hija de Filomena Fontanarrosa y Cayetano Devoto, hermano de Antonio, Bartolomé y Tomás.
Tuvo varios hermanos, pero mantuvo vínculo más estrecho con Emilio, Matilde y Cayetano.
Filomena enamorada de su primo, luego de recibir la aprobación de sus padres, se casó con él. Se trataba de José Devoto, hijo de Giobatta, uno de los hermanos mayores de la familia Devoto, no arribado a nuestro país.
Filomena y José, no tuvieron hijos, por lo cual ella dedicó gran parte de su vida, al voluntariado, la caridad y el bien común, colaborando en diversas asociaciones de beneficencia y educativas.
Participó activamente en la “Asociación Escolar Mutualista”, en su Junta Consultiva, en los años 1922, 1924, 1925, 1926 y 1927, junto a las señoras Regina Pacini de Alvear, Ernestina Torquinst de Bary y en otras Comisiones junto a Matilde Devoto de Ciovini, su hermana y Zulema Devoto de Shoo Lastra, su prima.
Colaboró activamente, en la “Junta de la Comisión de Damas del Patronato de la Infancia” y siempre perteneció a la “Conferencia de Señoras de San Vicente de Paul”.
El día 28 de junio de 1935, recibe la erección canónica, la parroquia San Rafael Arcángel, que fuera construida en su totalidad a expensas de Filomena, en memoria de su querido sobrino Rafael, hijo de Aurelio, para la que hizo traer de Italia, las bellísimas imágenes que ornamentan el templo, cuya forma es en planta de cruz latina de una sola nave.
También costeó sus vitrales y un maravilloso órgano de la fábrica Rieger que hizo importar de Checoslovaquia en el año 1936.
En solemne ceremonia , bendijo el templo y consagró su altar , el Emmo. Cardenal Santiago Luis Copello.
La señora, continuó su obra, con ayuda de las Damas de la Conservación de la Fe y el gran económico por ella ofrecido. Por lo cual se realizaron las obras que constituyen el Ateneo para la juventud y el Colegio.
Las dos instituciones llevan el nombre de “San Rafael” al igual que la parroquia.
Filomena tenía un estrecho vínculo con los hermanos corazonistas y confía a ellos la dirección y atención del colegio sito en la calle Simbrón 5275 y de parroquia en José P. Varela 5256. Estas decisiones fueron tomadas por la benefactora, siempre con la anuencia del Arzobispo.
Todas las instalaciones fueron bendecidas por el Cardenal, estando presentes, la señora , las Damas de la Conservación de la Fe, autoridades escolares, y el señor Presidente de la Nación doctor Ramón S. Castillo.
Estos sucesos se llevaron a cabo en el año 1942 y en ese mismo año, Filomena continúa con su labor benéfica.
En el apacible barrio de Monte Castro, en una casita del pasaje Albania 4676. que había sido comprada para una rifa que luego no se realizó, tuvo comienzo la misión de la Madre Fundadora María Isabel Fernández del Carmen y la hemana Margarita Luizzi. La señora de Devoto advirtió que el lugar era muy pequeño, para albergar a quienes aspiraban recibir educación alli, por lo cual hizo su generoso aporte donando el solar lindero, nuevamente en memoria de su sobrino, dando origen a la pequeña escuela San Rafael, que abrió sus puerta el 30 de abril de 1942, de la mano de la hermana Margarita Luizzi, impartiendo formación cultural a niños y jóvenes que recibían clases de piano, corte y confección , apoyo escolar y catequesis. A partir de 1948, funciona como guardería y jardín de infantes, dando lugar el el año 1962 al Instituto San Rafael de niñas exclusivamente, en el predio de la calle Benito Juárez 2159.
Pasados uno años, en 1945, doña Filomena adquiere un solar en la calle Calderón de la Barca 3056, con el fin de construir allí una escuela hogar, que se llamará al igual que las anteriores “San Rafael”, seguramente esto no ha sido casual. Esta escuela, tenía por objeto hospedar a niños y jóvenes carentes de recursos, a los que se les proporcionaba educación en artes y oficios, para que a su egreso tuviesen una salida laboral.
Con el transcurso de los años esta escuela primero dependió del Ministerio de Educación de la Nación y hoy pertenece a la ovita de los colegios privados.
En 1938, la señora dona en memoria de su esposo José Devoto, los fondos para la construcción de la casa de vacaciones “Hogar San José de la Montaña”, en tierras adquiridas por el Cardenal Copello, ubicadas en el Km. 60 de la ruta número 8, partido de Pilar. Filomena contrató para la ejecución de las obras al arquitecto Carlos O. Mazza.
Desde el 14 de enero de 1941 y hasta la actualidad, concurren allí seminarista y sacerdotes para realizar sus ejercicios espirituales y tomar vacaciones.
El 13 de junio de 1942, tuvo lugar la fundación de la Capilla del Sagrado Corazón , perteneciente al Hospital Italiano de San Justo.
Generosamente la señora Devoto de Devoto , costea en memoria de su esposo don José, ex presidente y benefactor de esa institución, una Casa-Habitación, que lleva el nombre de Filomena Devoto de Devoto , para que sean alojadas las hermanas que tendrán a su cargo la asistencia de los pacientes. Ellas son religiosas de la Capitanía de Milán, llamadas Hermanas de la Virgen Niña.
Cabe destacar que la Capilla también ha sido donación de la señora, pues existe un pergamino que da testimonio de este acto, dejando constancia escrita de lo antes dicho, con la firma de testigos y asistentes al acto, documento que hasta el día de hoy se halla guardado en un cofre detrás del altar, tal como lo refiere la doctora Hilda Noemí Agostino, en su publicación Instituciones, El Hospital Italiano de San Justo y la Capilla del Sagrado Corazón.
La Asociación Escolar Mutualista, mediante la cual se impartía ayuda económica a escuelas dependientes del Consejo Nacional de Educación, a Escuelas Normales, al Patronato de la Infancia, entre otras. Aquí, en Villa Devoto, recibieron ayuda de esta institución por intermedio de la señora Devoto , los colegios Nuestra Señora del Huerto, San José y Nuestra Señora de la Misericordia. Estos datos corresponden a un período entre los años 1915 a 1925.
Doña Filomena, efectúa otra importante donación en memoria de su amado esposo don José, para la construcción de un instituto educativo al que se lo denomina “Nuestro Hogar” a solicitud del Cardenal Santiago Copello, siendo bendecido por el mismo Arzobispo, el 26 de marzo de 1938 y por él entregado a las hemanas de la Merced. Estas religiosas, condujeron el Instituto hasta el año 1974, momento en el que pasa a ser dirigido por la Oblatas del Sagrado Corazón, cambiando el nombre del instituto por el de “María Santísima de la Luz”, ubicado en la calle Azcuénaga 1870 , Vicente López. Cabe mencionar que fue creado, para niños y jóvenes en situaciones marginales, tal como lo ha referido el pbro. Carlos Pimentel y que en la actualidad dista de ser, lo que fue en su comienzo.
En otra ocasión y también el la década del 40, la señora juntamente con la Damas de la Conservación de la Fe, fundaron el Colegio Sagrado Corazón de Venado Tuerto, obra que le fue confiada para su funcionamiento a los Hermanos del Sagrado Corazón.
La bondadosa Filomena, no solo se ocupaba del tema educacional, sino que participó en varias ocasiones en la Junta de la Comisión de Damas del Patronato de la Infancia, en la Comisión de Damas de San Vicente de Paul y en las Damas de la Conservación de la Fe.
Integró la Comisión de Damas del Congreso Eucarístico, siendo designada junto a otras señoras por el entonces Arzobispo de Buenos Aires , el 24 de septiembre de 1932, para desarrollar tareas organizativas en pos del Congreso Eucarístico que tendría lugar en 1934.
Arribando al final de este relato, cabe destacar, que en vida de don José Devoto su esposo, ambos crearon el “Hogar Devoto” , para señoras adultas mayores, sin familia.
Este se hallaba ubicado, en el barrio de Palermo a metros de la hoy Plazoleta Julio Cortazar en Serrano y Honduras. La casona tenía una superficie de 1400 metros.
Una vez fallecido José, Filomena dispuso que a su muerte, este Hogar debía ser administrado por la Asociación San Vicente de Paul, quienes desde 2005 a 2007, han querido mudar a las señoras a otro Hogar, para disponer de la propiedad, para otros fines. En la actualidad se desconoce su destino .
A causa de su accionar y su fecunda labor benéfica en pro de la educación y el bienestar de sus semejantes, siempre presente donde se la requiriera, doña Filomena , ha sido merecedora en el mes de abril de 1936, de la “Cruz Proeclesia et Pontifice” , distinción que le entregara S.S. el Papa Pio XI.
Luego de haber consagrado su vida a la generosidad y amor por su prójimo, la señora Devoto de Devoto, dejó de existir el 12 de septiembre de 1947.

Bibliografía

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